SEMANA SANTA.

Un año más, la Semana Santa ha llegado, llenando del sonido de tambores, bombos, timbales, cornetas y matracas las calles de nuestros pueblos y ciudades. Esta Semana Santa ha sido, al menos hasta hoy, Miércoles Santo, atípica. Comenzó el pasado Domingo de Ramos, con la procesión de los Ramos. Una procesión que pudo salir, a pesar de la amenaza de lluvia, y que congregó a miles de personas a su paso por las calles del centro de la capital aragonesa, entre los que había miles de niños con sus palmas y sus dulces. Esta es una de las procesiones a las que le tengo más cariño, supongo que por el recuerdo de mi infancia, de mis padres, y de las palmas que llevábamos todos los años mi hermano y yo cargadas de botellas, monedas y paraguas de chocolate.

Menos suerte tuvieron las cofradías de por la tarde. Mi propia cofradía, la Columna, tuvo que suspender la procesión del Traslado a mitad de recorrido ante el intenso aguacero que cayó sobre Zaragoza. Y es que el cielo se abrió, y prácticamente hasta el martes no ha parado de llover en esta Ciudad. También el lunes la lluvia hizo acto de presencia y obligó a suspender o recortar el recorrido de las cofradías que salieron ese día.

Incluso hoy, Miércoles Santo, la lluvia ha vuelto a caer, aunque al menos hoy, la lluvia ha dado comienzo bien entrada la madrugada, y la mayor parte de las cofradías han podido concluir su recorrido, como es el caso del Ecce Homo, con su talla del siglo XIV. Menos suerte han tenido el Calvario, a quien ha pillado a punto de recogerse en San Cayetano, o a la Dolorosa, que les ha pillado en la calle Don Jaime, todavía un poco lejos de la iglesia donde recogían. Al menos, el Encuentro ha podido celebrarse con normalidad, y la Dolorosa ha podido desfilar con normalidad por las estrechas calles del barrio de La Seo, donde el olor a incienso a envuelto los palacios renacentistas ubicados en esta zona del Casco Antiguo de Zaragoza. Una zona donde el sonido de los bombos y tambores retumba de una forma espectacular por la esterchez de sus calles entre el silencio y el recogimiento de la gente.

Y mañana, por fin es Jueves Santo, el gran día de mi Cofradía, la Columna. A las 21:30 horas en punto, las puertas de la iglesia de Santiago se abrirán nuevamente para que la Avenida de César Augusto se tiña de rojo y blanco y puedan salir nuestras 4 imágenes acompañadas por 800 cofrades.

Quedan pocas horas para que la Columna salga de nuevo a las calles de Zaragoza. Los mejores lugares para verla, podrían ser la propia avenida de César Augusto, avenida en la que se inicia nuestra procesión. El Paseo de la Independencia es otro de los lugares donde mejor se puede contemplar nuestro desfile, dado que en este lugar la cofradía alcanza un elevado grado de perfección escénica, mientras que también el entorno de la Seo es otro de los lugares destacados para contemplar nuestro paso. San Cayetano, iglesia donde encerramos en la ya madrugada del Viernes Santo, es el último de los lugares recomendados, por la espectacularidad de nuestros retoques conforme van encerrando nuestros pasos.

Esperemos que la lluvia nos de un respiro, y que lo que queda de Semana Santa pueda desarrollarse con normalidad.