LOS POLACOS HAN DESCUBIERTO QUE HAY UN TELETUBBIE GAY.
Como ya sabeis, publico todos los meses un artículo de opinión en El Pollo Urbano. este es el artículo publicado a comienzos de mes de junio.
Efectivamente. Las autoridades polacas, después de sesudas reuniones, han llegado a la conclusión de que quizás, sólo quizás, uno de los teletubbies, pueda ser gay. Y por ese motivo, que hace peligrar la moral y el correcto desarrollo educativo de niños polacos, Ewa Sowinska, que es nada menos que la portavoz polaca de los Derechos del Niño, ahí es nada, ha pedido a los sesudos expertos de su departamento que analicen si la famosa serie televisiva infantil producida por la BBC británica fomenta la homosexualidad.
Si después de leer este primer párrafo aún te queda aliento, continúa. Esto va en serio, no es una inocentada, ni un mal sueño. En este mundo en el que parece que ciertos políticos se ocupan de chorradas en lugar de resolver los problemas que de verdad afectan a los ciudadanos, este es un episodio de lo más normal. Como aquello del anuncio de Dolce & Gabbana.
Esta mujer de mundo, garante de los derechos de los niños de su país, declaró, supongo que después de mucho pensar y meditar sobre el asunto, que "pienso que será conveniente que esa sospecha sea estudiada por los psicólogos de mi oficina y que sean ellos los que dictaminen si la serie puede ser transmitida por la televisión o no", señaló. "Me parece conveniente que un grupo de psicólogos hable al respecto con los niños, porque si efectivamente esos dibujos animados promocionasen comportamientos inadecuados habría que adoptar medidas para evitarlo", añadió. Espero y deseo, por el bien de los niños polacos, que esta buena mujer no piense demasiado. Y lo que más deseo es que jamás tenga obligaciones institucionales en Bruselas. Por cierto, la Unión Europea, ya ha advertido a esta buena mujer que no tolerará la posible censura de Polonia a este programa, defendiendo la libertad de expresión de los medios de comunicación para decidir sus contenidos. Las autoridades polacas, famosas ya en todo el continente por sus actos homófonos y por sus continuas pegas ante cualquier decisión que adopte Bruselas, en pos de la libertad y la independencia polaca, deben pensarse que van por libre y que no forman parte de una Unión que garantiza los derechos más fundamentales de los ciudadanos europeos.
Pero a la autoridades polacas, eso de la libertad de expresión debe sonarles a chino, aunque este país les quede un poco lejano. El problema del teletubbie gay debe afectar a la seguridad nacional y al futuro del pueblo polaco. Deduzco que si las autoridades polacas se preocupan por este "problema", es que no tienen otras cosas por las que preocuparse. Supongo que los niños estudian en colegios maravillosos, que no hay fracaso escolar, ni pobreza extrema en la infancia, ni abusos. Los niños polacos deben ser los privilegiados de los nuevos países del este de Europa que entraron en la Unión Europea no hace mucho. De hecho, Polonia debe ser en la actualidad uno de los países que mejor deben tener su sistema educativo y en el que mejor viven los niños, si un personaje tan importante como la portavoz polaca de los Derechos del Niño se fija en algo así. Mucho debe aburrirse esta mujer para ver a Tinky-Winky como un peligro para los tiernos infantes de su país.
Polonia, miembro de pleno derecho de la Unión Europea, no para de darnos sorpresas. O mejor dicho, algunos de sus más prominentes políticos, no paran de sorprendernos. Además de las declaraciones de la portavoz de los Derechos de los Niños, la penúltima guinda la puso el viceministro polaco de Educación, Marek Orzechowski. Según afirmó no hace mucho el viceministro, los ciudadanos polacos que reconozcan su homosexualidad no podrán ejercer de maestros. Por suerte, estas declaraciones levantaron reacciones airadas en todo el continente, tanto entre los colectivos gays como entre la clase política europea. Ante las numerosas críticas que recibió su propuesta, suavizó sus palabras señalando que sólo perderían su trabajo los maestros que "propagasen" la homosexualidad o que la presentaran "como un estilo de vida digno de ser imitado".
Pero esto, lamentablemente, no es novedoso. Desde Varsovia hasta Teherán o Washington, el fundamentalismo y la homofobia, de una forma o de otra, están a la orden del día. En al ámbito mundial, políticos como el presidente norteamericano George Bush, el presidente de Irán Mahmud Ahmadinejad, o los ya citados políticos polacos están extendiendo por el mundo una ola de conservadurismo cateto que no conviene a nadie. Europa, por suerte, es una isla de libertad en el mundo, a pesar del gobierno polaco. Y no podemos permitir que políticos de tres al cuarto como los que existen en este país del Este de Europa nos hagan retroceder ni un milímetro en las libertades y derechos que tantos siglos nos ha logrado conquistar a las democracias europeas.
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Begoña -